El filtro de aire de la cabina es una parte integral del sistema de aire acondicionado.
En la mayoría de los casos, todos aprendimos a ignorar y luego a abrazar el olor a polvo viejo, a motor y a lo que se haya podido caer quién sabe cuánto tiempo atrás en los asientos. ¿El olor a carro nuevo? Nos encantaba el olor a carro viejo.
Ahora, los olores son inaceptables. Hoy en día, la mayoría de los autos y camionetas fabricados en las últimas décadas tienen un filtro de aire de cabina para mantener alejados los malos olores, así como para reducir las partículas microscópicas de polvo del exterior que entran en el auto.
El filtro de cabina suele considerarse una parte integral del sistema de aire acondicionado, pero a menudo se pasa por alto. El filtro elimina los contaminantes y residuos del exterior y evita que entren en el habitáculo, garantizando que el aire interior esté limpio y libre de polvo y, en algunos casos, de alérgenos inertes. Pero no sólo están diseñados para el confort: un filtro de cabina sucio puede obstruir y limitar el flujo de aire, además de causar olores y provocar la ineficacia del aire acondicionado.
Aunque casi el 95% de los vehículos en circulación los llevan, muchos conductores siguen sin darse cuenta de que los tienen y menos aún que este debe cambiarse cada cierto tiempo.
Como en el sector de bienes raíces, hay que recordar esas tres palabras tan importantes: ubicación, ubicación, ubicación. La mayoría de los filtros de cabina se encuentran detrás de la guantera o debajo del tablero, pero algunos están debajo de la coraza, junto al parabrisas.
En realidad, sin embargo, puede que el procedimiento tenga algunos pasos más. La mayoría de los fabricantes recomiendan sustituir los filtros de cabina al menos cada seis meses o cada 10,000 kilómetros -o más a menudo en condiciones duras, así que consulta el manual del propietario o visítanos para una revisión general. También puedes encontrar boletines de servicio técnico en los que se explica el cómo y el porqué de las revisiones periódicas.
Una vez que se haya ubicado dónde está el filtro, hay que sacarlo para que logren ver el estado del mismo. En REPSA contrastamos el estado del filtro en uso contra uno nuevo con el objetivo que puedan ver la diferencia entre un filtro sucio y uno limpio, una vez que ya se les ha explicado la importancia de cambiarlo.
Toyota, por ejemplo, publicó un boletín de servicio técnico sobre los olores del sistema de aire acondicionado, que recomienda sustituir el filtro de cabina como medida de mantenimiento preventivo, y muchos fabricantes ofrecen estudios que demuestran que los filtros de cabina son algo más que un simple detalle.
La sustitución regular de los filtros de cabina ayuda a proteger contra los contaminantes transportados por el aire, favorece un mejor flujo de aire a través del vehículo y mejora el rendimiento del aire acondicionado. Son ventajas que apreciarás.
En REPSA AUTOCENTRO recomendamos el cambio del filtro de cabina cada 10,000 kilómetros o cada seis meses y el mantenimiento completo al sistema cada 20,000 kilómetros o una vez al año.