Apretando ese poco más podría estar dañando el sistema de su automóvil más de lo que vale la pena. 

Tanto si queremos llenar el tanque como si simplemente le echamos la mayor cantidad de gasolina posible, algunos de nosotros llenamos nuestros vehículos pidiendo apliquen un poco más, el famoso “relléneme” luego que la bomba detiene el suministro para indicar que el depósito está lleno. ¿La adición de ese poco de combustible puede dañar los componentes del sistema de combustible de su coche?

De acuerdo con expertos en la materia, en el depósito de combustible de un vehículo hay mucho más que un tanque. Los sistemas de combustible se han vuelto más sofisticados con el tiempo para mantenerse al día con leyes de emisiones cada vez más estrictas. 

Llenar a tope podría dañar el sistema incorporado de recuperación de vapores de reabastecimiento (ORVR por sus siglas en ingles), un filtro de carbón que recoge vapores de combustible potencialmente dañinos durante el proceso de reabastecimiento y a continuación, los absorbe con carbón activado. El ORVR ayuda a reducir las emisiones de hidrocarburos en alrededor de un 95 por ciento durante el reabastecimiento, según expertos.   

Añadir más combustible después de que la bomba de gasolina se detiene puede dañar el cartucho de carbón saturándolo con combustible y hacer que la luz de comprobación del motor se ilumine. Si el ORVR está dañado, no capturará adecuadamente esos vapores dañinos. El sistema suele durar toda la vida útil de un coche, pero si se “rellena”, se podría producir una reparación evitable que podría costar cientos de dólares. 

Otra cosa a tener en cuenta es que “rellenar” su tanque podría causar que la gasolina se derrame en el suelo, lo cual es un peligro para la seguridad y el medio ambiente.